
El tema del momento es la controversia por la anulación del Reglamento de VISADO, le agradezco mucho a Romer Barboza, profesional de dilatada trayectoria por permitirme publicar su opinión y exhortación.
Jueves y viernes recibí llamadas y whatsapps de los colegas con un solo tema: El TSJ anuló el Visado y ¿que haremos ahora?
Para todos los colegas contadores públicos les tengo una sola respuesta: lo mismo que hemos venido haciendo hasta ahora: Visar.
Antecedentes
La decisión de la Sala Político Administrativa la esperábamos hace muchos años y la respetamos y acatamos, pero no la compartimos. Tiene, en nuestra opinión, un error en su origen: ha considerado al Visado como un tributo porque, entre muchos otros, especialmente los contadores públicos, estudiosos del derecho tributario, es lo que han tenido a mano para analizar esta figura creada en el estado Zulia hace veintinueve años y en algunos otros estados un poco antes o después.
Es bueno que se conozca que este instrumento de defensa gremial se originó en la base de la profesión.
Partió la idea de los colegas, se asentó y aprobó en las Asambleas de los colegios regionales, a despecho de la federación de la época y, finalmente, se convirtió en reglamento nacional, también a través de una Asamblea.
No fue, ni lo es, ni lo será, una imposición y eso le despoja de raíz de la pretensión de calificarle como un tributo.
¿De que estamos hablando?
Es un acuerdo de voluntades y como tal, afectando como en efecto lo hace, a quienes se impusieron unas condiciones para asegurarse el mejor ejercicio de su profesión, es válido para quienes así lo decidieron, siempre que mantengan la misma voluntad en el tiempo, lo cual no es una obligación, pero tampoco sería de extrañar si ha colaborado, de lo que no hay duda, con el desarrollo del gremio, pretensión última de quienes lo idearon y aprobaron.
¿Quien ha visto un tributo aprobado por los sujetos pasivos de la obligación tributaria?
La voluntad es el origen de la validez de nuestras decisiones, es imprescindible tanto en los actos individuales como en los colectivos. La voluntad debe ser libre física e intelectualmente, esto es, no permite apremio, forzamiento, presión de ninguna naturaleza.
Así expresada, libre como el viento dirán los poetas, está por encima de convencionalismos de cualquier naturaleza.
La autonomía de la voluntad es fundamental para la validez de los actos jurídicos, todos los realizados por el hombre de manera consciente y voluntaria y tienen consecuencias jurídicas.
“La autonomía de la voluntad es un principio general del Derecho Civil. La misma consiste en la libertad que reconoce el ordenamiento jurídico a los individuos, a fin de que los mismos autorregulen sus intereses. Esta autonomía se manifiesta a través del acto jurídico, herramienta que el derecho otorga a los sujetos para crear, modificar, transferir o aniquilar sus derechos y obligaciones” (“Limitaciones a la Autonomía de la Voluntad. Wagner de Tizon, Claudia).
De tal forma que, si una Asamblea de Contadores Públicos decide libremente crear una cuota, sea esta fija o variable, para lograr los fines del gremio, esta es válida. Léanse todas las decisiones de los tribunales en materia mercantil y civil. Debe cumplirse, claro está, con la convocatoria cónsona con la normativa respectiva y no ser violatoria de disposiciones legales.
Es ahí donde radica el error en la calificación de los hechos y el derecho, base del derecho administrativo, se ha considerado como tributo, lo que es un aporte gremial.
¿Cual es mi recomendación?
Mi recomendación: partir desde el principio, quienes estemos de acuerdo con seguir visando, solicitemos una Asamblea Extraordinaria del Colegio en el cual estemos inscritos y propongamos establecer un mecanismo, tenga el nombre que tenga, mediante el cual los colegios sigan teniendo los ingresos necesarios para el fortalecimiento del conocimiento, la seguridad social, la defensa gremial y todo aquello que fue el origen de los gremios en la antigüedad y permanece en la conciencia colectiva de los gremios actuales, muy especialmente el de contadores públicos, ejemplo de democracia, participación y solidaridad gremial.
Esta es una buena oportunidad para el ejercicio creativo, la suma de intelectos y la defensa de un gremio que, en su conjunto, hace posible el manejo de las empresas, el crédito, los tributos nacionales y municipales, las retribuciones de trabajadores y accionistas. En fin, quienes velan por la salud de la actividad empresarial.
¿Y qué haremos ahora? Visar.
Ok. muy positivo el planteamiento, pero los nuevos contadores socialista van a seguir nuestras sendas. van a visar?????
De acuerdo, sigamos con el Visado
De acuerdo, sigamos con el visado .
De acuerdo. Debemos Visar
excelente, de acuerdo completamente